Hay momentos en la vida del aficionado a los animes, en los que debe de saber qué es lo que debe de ver y qué es lo que no debe de ver, principalmente porque uno acaba teniendo bastante buen olfato para saber qué contenido es al que no debes de acercarte ni con un palo, y el que realmente es bueno, aunque sus apariencias no lo indiquen. Pero también existen animes que parecen ser buenos, y que cuando ya estás por la mitad de éste, es más de lo mismo. Uno de estos casos es el de Hanayamata.
Hanayamata es un anime basado en un club escolar de chicas que practican Yosakoi. Comenzó como todo anime escolar, una chica conoce a otra, y ambas crean un club tras muchas indecisiones. Estas dos chicas son Hana N. Fountainstand, y Naru Sekiya. Poco a poco, a lo largo de los doce capítulos que componen este anime, van creando un club, para cumplir su sueño de bailar yosakoi todas juntas.
A simple vista se observa que, bueno, es un anime de escolares como otro cualquiera, con chicas monas, como otro cualquiera, y que va a tener tanta trama como cualquier otro Slice Of Life típico. Y no nos equivocamos.
Los personajes presentados en la serie no están del todo mal. Son unos personajes quizás demasiado estereotipados y que no tienen demasiado desarrollo a lo largo de la trama, salvo en ciertos puntos en los que utilizan el drama como un recurso barato para atraer la atención del espectador. Nos encontramos con la chica energética que quiere llevar el sueño de sus amigas y el suyo hasta el final, Hana; la chica insegura que tiene miedo de todo lo que le ocurre a su alrededor, Naru, y otras tres chicas con problemas de inseguridad que parecen sacados de cualquier anime que trate temas dramáticos: Problemas familiares, con los amigos… lo típico. Mantienen un estilo típicamente «moe» y probablemente cuando termines este anime no te acordarás de quién es quién, como me ocurrió a mí.
Quizás en un punto el anime quisiese reforzar lo que es la amistad entre las chicas y demostrar lo que siempre se denomina como «poder de la amistad», pero aquí lo único que hacen con ese poder es en vez de cargar el anime de momentos alegres y divertidos, hacen un sobreuso de lo que es el drama, que en sí no está mal usarlo, el problema viene cuando es casi injustificado y sin relevancia alguna para la trama.
Algo que sí que realmente se puede admirar de esta serie es lo buena que es tanto la animación como el estilo de la serie en general. Tiene unos tonos pasteles en todo momento que son más que suficientes como para matar de una sobredosis de azúcar a toda persona que lo vea. Esto, combinado con una animación bastante fluida, propia de Madhouse, estudio creador de animes como No Game No Life, y encargado de dar vida a las películas de Mamoru Hosoda, hace que el anime en aspectos técnicos sobresalga con mucha facilidad.
La música es otro punto a favor. Tiene tanto un opening como un ending que son bastante buenos, con un toque japonés muy interesante, y que además están cantadas por las propias seiyuus del anime. La canción de opening se utiliza dentro del anime como la canción que las chicas utilizarán para bailar Yosakoi, un recurso que está bien utilizado, ya que provoca que el espectador pueda reconocer esa canción con tremenda facilidad tras terminar de ver el anime. Algo que sí que se podría decir que es un problema es la falta de una banda sonora que acompañe al anime, y que no lo deje tan vacío en algunos puntos. No es mala, ni mucho menos, pero la sensación de estar escuchando en todo momento lo mismo es muy evidente, con remixes de la propia canción del opening, que colocan en diversas partes del anime, y que denotan una falta de canciones originales.
Este anime, es, como muchos otros, un anime falto de trama, que en términos de estilo, sonido y música es más que sobresaliente, pero que unos personajes muy genéricos, junto con una historia que no hace más que darle vueltas a lo mismo para acabar de la forma más típica posible, provocan que el anime en sí decaiga hasta tal punto que cuando pasan los primeros seis capítulos, se pierde completamente el interés en lo que te está queriendo contar, y con razón. El Yosakoi es utilizado en vez de como una herramienta que puede dar mucho juego (Porque es evidente, que un anime de baile que trate a fondo el yosakoi todavía no ha sido creado como tal, y si se hiciese bien, merecería ciertamente la pena) como el pretexto para sacar una historia típica y aburrida.
En conclusión…
Hanayamata es un anime cae en muchos errores, principales de narrativa y de personajes, pero que en términos técnicos es más que sobresaliente. Sólo podría recomendarlo a una persona que quisiese desconectar por completo de lo que está ocurriendo en pantalla, y se centrase en lo bonito que es en general, porque por lo demás, no merece demasiado la pena. Quizás otro anime sobre Yosakoi lo haga mejor en un futuro, porque este ha caido en los errores típicos que a un nivel de calidad técnica son más que imperdonables. Madhouse, you didn’t find a way this time.
Ficha Técnica
Nombre: Hanayamata
Estudio: Madhouse
Nota: 5 (Animación: 8 – Estilo: 7 – Música: 7 – Personajes: 4 – Trama – 2)
Una respuesta a “Hanayamata – El club del Yosakoi”